Gastronomía de Denia: Quique Dacosta y el premio Salsa de Chiles
En la sucesión vertiginosa de noticias relacionadas con la gastronomía de Dénia, llega un nuevo reconocimiento a la pasión y la vanguardia de la cocina de Quique Dacosta. Nuestro chef más laureado ha ganado el premio Salsa de Chiles que concede el diario ABC, en el que se reconoce su excelencia a la hora de innovar.
Desde el Hotel Los Ángeles nos queremos sumar a las felicitaciones por este galardón que el jurado otorga a Quique Dacosta como Mejor Restaurante de Cocina Creativa, y que va vinculado al menú que presentó el pasado mes de febrero: DNA, la Búsqueda. Una propuesta que resulta de rastrear el entorno más próximo, para «rescatar ingredientes olvidados por los propios lugareños, e incluso ignotos» como él mismo declaraba, contando con la complicidad y la memoria de aquellos que han transmitido sabores, formas de cocinar y de conservar los alimentos. El restaurante que lleva su nombre –tres estrellas Michelin– nos presenta una cocina consciente para ser degustada de igual manera. La slow-food que despierta nuestros sentidos con sabores naturales potenciados desde una concienzuda creatividad.
Se han escrito infinidad de páginas sobre la inspiración, la constancia y la visión de este gran cocinero, que ha ido sumando estrellas desde que consiguió la primera en 2002, que ha abierto un restaurante en Dubai y reivindicará los arroces valencianos en otro en Londres, por mencionar algunos de sus logros.
Pero ahora queremos destacar una de sus recientes reflexiones: «Hemos crecido mucho a nivel alimentario, pero nos hemos empobrecido en la variedad». De hecho, su búsqueda por la diferencia, su reivindicación por esos productos marginados surge de esta evidencia, contra la que quiere luchar. No sólo desde sus restaurantes, sino con sus incursiones en escuelas e institutos de la comarca, donde ha colaborado mostrando su faceta más pedagógica.
Y no podemos estar más de acuerdo. Porque nos entristece esa epidemia que hace comer a los niños -y a muchos adultos- lo mismo, viajen a Dénia o a Amsterdam, a Nueva York o a Mallorca. Son muchos años de experiencia los que nos permiten afirmar que la curiosidad infantil también se extiende a la comida: a probar, y buscar con interés lo que se descartó el día anterior. Que los hijos harán lo que vean hacer a sus padres, y que con los sabores también hay un proceso de evolución y aprendizaje. Por eso, como parte de la educación, también les tenemos que enseñar a comer. En forma y contenido. No podemos rendirnos -como no lo hacemos en otros aspectos de su formación- a la hora de transmitir con paciencia y afecto el gusto por la comida variada, propia de cada lugar. Para que disfruten la de su tierra, y se aventuren en las de otras culturas cuando viajen. Y por supuesto, desde el ejemplo.
Así que aquí nos tenéis, desde el restaurante del Hotel Los Ángeles, aportando nuestro granito de arena para que podáis disfrutar de nuestra preciosa Dénia, y su sabrosa riqueza gastronómica.
El Hotel Los Ángeles, aportando nuestro granito de arena para que podáis disfrutar de nuestra preciosa Dénia
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